Llegó la primavera y mi cuerpo lo sabe. Siendo tan friolenta no veía la hora de que las temperaturas subieran y eso que Roma no se caracteriza por inviernos extremos. Y es que siendo Vata dosha necesito siempre calor para equilibrar mi energía. Cuando descubrí los doshas del Ayurveda entendí el por qué de muchas...