Estas posturas de yoga son buenísimas para activar la circulación de las piernas, ideales después de un día en el que se ha estado sentado mucho tiempo, después de un largo viaje en la misma posición o después de estar de pie demasiado tiempo. Son muy fáciles de hacer y dan un alivio inmediato a las piernas.
La primera foto es simplemente acostarse con las piernas apoyadas al muro y dejar que la sangre fluya hacia el corazón.
En las dos fotos anteriores, separamos una pierna del muro, mantenemos las rodillas estiradas y hacemos movimientos continuos con el tobillo para poner el pie en punta y flex (con los dedos hacia la canilla y el talón hacia el cielo). Alternamos con cada pierna.
En la última foto, pegamos las piernas a la pared y las abrimos a su máximo nivel de flexibilidad. Sin separar los pies del muro, volvemos a hacer punta y flex.
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